Un asiento en los aburridos premios Goya 2014

Ayer tuve el placer de volver a repetir un año más en los premios Goya, en su 28 edición. Sin duda la gala más aburrida, lenta y mal llevada desde hace muchos años.

                                                      (el antes y el después de el cambio radical)

La idea de que Manel Fuentes, llevase el control y mando de la ceremonía ya me parecía algo difícil de resolver y como era de esperar no superó mis expectativas. Su aparición fue breve y demasiado guionizada (incluso en muchas ocasiones se le veía leer el teleprompter).

"La gran familia española" que era la que más nominaciones recibió, fue el fracaso de la noche que no tuvo nada que hacer frente a la gran triunfadora de la noche 'Vivir es fácil con los ojos cerrados'.  

Sin duda los momentos más emotivos de la noche los protagonizaron Terele Pavez ganando el premio a "mejor actriz de reparto" y Javier Cámara, que consiguió un merecidísimo "mejor actor protagonista" (a la sexta le llegó la vencida).En general una gala soporífera e insípida, con unos skeetchs de vergüenza ajena y un ritmo flemático que produjo más de un bostezo a los allí presentes.

Pero no todo fue desastre, todo lo contrario, el cocktail de después de la gala fue uno de los mejores a los que hemos ido. Una fiesta divida en tres grandes salones, con diferentes iluminaciones y música ambiental (una más chillout, otra con música de los 60s y la última con música cool y actual) .Comida buena y muy variada (jamón serrano, croquetas originales, canapés muy elaborados o incluso un sabroso sushi).
La mayoría de actores se marcharon bastante pronto, aunque muchos de ellos se quedaron aprovechando la barra libre y las ganas de bailar. Yo destaco la simpatía de Maria León, la belleza extrema del actor argentino Rodrigo Guirao y el precioso vestido de Zuhair Murad que lució la actriz Clara Lago.

En general una edición de los Goya agridulce, pero que un año más estoy suuuuper agradecido de poder estar allí presente! Nos vemos en 2015!